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Derriba Argumentos en Tu Vida, Tu hogar y Tu Descendencia

Yo espero ahora lo que va a suceder en el futuro con mi vida, mi hogar y mi descendencia, yo creo ahora lo que va a suceder en el futuro, por lo tanto puedo declarar que el propósito en mi vida lo ha dado Dios y mi destino tiene que engranar con el propósito de Dios.

Desde el vientre hay un propósito de Dios en mi destino divino, desde el vientre Dios puso habilidades y talentos para que nosotros podamos desarrollarlo al servicio de Él, observemos Isaías 44:1-3 y también a Isaías 49:1-3. Ahora bien todo nuestro propósito y nuestro destino está escrito en un libro, Salmos 139:16, por lo tanto debemos “Alcanzar nuestro destino divino para que el propósito de Dios se cumpla en la tierra” en otras palabras “Cuando logramos nuestro destino, Dios logra Su propósito”.

El gran problema es que el enemigo usa elementos legales que la Palabra llama argumentos con el fin de interferir con nuestro destino, en todo tiempo el enemigo anda como león rugiente buscando a quien devorar, en el libro de Job 1:6-12, vemos como Satanás se presentó delante de Dios y levantó argumentos contra Job y le acusó; la Palabra dice que Satanás es nuestro acusador, Apocalipsis 12:9-10.

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Yo espero ahora lo que va a suceder en el futuro con mi vida, mi hogar y mi descendencia, yo creo ahora lo que va a suceder en el futuro, por lo tanto puedo declarar que el propósito en mi vida lo ha dado Dios y mi destino tiene que engranar con el propósito de Dios.
Desde el vientre hay un propósito de Dios en mi destino divino, desde el vientre Dios puso habilidades y talentos para que nosotros podamos desarrollarlo al servicio de Él, observemos  Isaías 44:1-3 y también a Isaías 49:1-3. Ahora bien todo nuestro propósito y nuestro destino está escrito en un libro, Salmos 139:16, por lo tanto debemos “Alcanzar nuestro destino divino para que el propósito de Dios se cumpla en la tierra” en otras palabras “Cuando logramos nuestro destino, Dios logra Su propósito”.
El gran problema es que el enemigo usa elementos legales que la Palabra llama argumentos con el fin de interferir con nuestro destino, en todo tiempo el enemigo anda como león rugiente buscando a quien devorar, en el libro de Job 1:6-12, vemos como Satanás se presentó delante de Dios y levantó argumentos contra Job y le acusó; la Palabra dice que Satanás es nuestro acusador, Apocalipsis 12:9-10.
El enemigo usa 3 estrategias básicas:
  1. En el libro de Lucas 22:31, el enemigo utilizó un argumento contra Pedro y pidió que fuese zarandeado quiso tergiversar su destino; la negación de Pedro prácticamente lo sacó de su destino y el Señor tuvo que ir a restaurarlos lo volvió a colocar en el destino divino para que se cumpliera en él el propósito de Dios para su vida, Juan 21:15-17; tres veces le negó, tres veces lo restauró.
  2. A través de nuestros pecados y nuestra maldad: No hay nada que dañe mas tu destino que el pecado y la maldad.
  3. A través de las maldiciones generacionales: Proverbios 26:2 “Como el gorrión en su vagar, y como la golondrina en su vuelo, Así la maldición nunca vendrá sin causa”. La Maldición se convierte en Iniquidad cuando deja marcas, cuando moldea nuestra identidad y cuando desvía nuestro destino. Cuando vamos a nuestros Padres y Abuelos encontramos patrones de iniquidad que se repiten en nosotros y en nuestra descendencia; Dios ha diseñado este tiempo para romper esos patrones de maldición y de iniquidad con el cual el enemigo nos ha acusado de día y de noche tratando de cambiar nuestro destino divino con el fin que no se cumpla el propósito de Dios en nuestras vidas, hogar, familia y descendencia.
Ahora bien; cuantos quieren darle solución a esto, ya que por causa de los argumentos que el enemigo ha levantado contra nuestra vida, hogar y familia; todo el destino se ha torcido y se ha tergiversado hasta tal punto que nos hemos desviado del propósito de Dios.
Comencemos con lo sencillo, tenemos que acercarnos a Dios a Elohim para que a través del sacrificio de Cristo en la cruz del calvario obtengamos el beneficio de Su muerte para nuestra vida, hogar, familia y descendencia. La cruz fue la transacción legal mas grande dada por el Dios, cuando Jesús murió en la cruz hubo un veredicto final contra el diablo:
  1. Acercarnos a Dios como Padre: En Lucas 11:2 encontramos la oración del Padre Nuestro, “Cuando Oréis decid: Padre nuestro que estás en los cielos…”.
  2. Acercarnos a Dios como Amigo: En Lucas 11:5 “Les dijo también: ¿Quién de vosotros que tenga un amigo, va a el…”.
  3. Pero también podemos acercarnos a Dios como Juez, Isaías 33:22, observemos el libro de Lucas 18:1-3, para que resuelva el asunto de manera favorable; para presentar los argumentos necesarios e ir con nuestro abogado Jesús y derribar todos los argumentos que el enemigo ha levantado contra nosotros, debemos detener al enemigo que anhela interferir con el propósito que Dios tiene para tu vida, tu hogar y tu descendencia.
Por lo tanto hoy te invito para que con toda tu familia vayamos al tribunal del cielo y deshacerte de todo lo que está en contra de tu vida, tu hogar y tu descendencia, esto es un acto de fe el cual podemos ejecutar, ir delante del Juez, así como está escrito en el libro de Daniel 7:10, “El juez se sentó y los libros fueron abiertos…”, Dios nos da acceso por medio de la sangre de Cristo, Hebreos 10:19-22 y nosotros nos acercamos como está escrito en Romanos 12:1, hoy vamos a presentar nuestro caso para liberar el veredicto a nuestro favor así como está escrito en Colosenses 2:14, quitar de en medio los argumentos que hay en contra nuestra y llevarlos a la cruz del calvario.
Vamos a mirar el caso de Moisés, en el libro de Números 14:11-12, Dios dijo a Moisés “Yo los heriré con mortandad y los destruiré…”, Moisés fue ante Dios y apeló esa decisión diciendo “Señor no puedes hacerlo” y presento el caso basando sus argumentos en el propósito que Él tenía para Su Pueblo:
  • Tu propósito está en ellos, verso 13.
  • Tu reputación está en ellos, “Los sacaste de Egipto pero no pudiste llevarlo a Tu propósito”, versos 14 al 16.
“Señor si voy al tribunal del hombre seré condenado y el propósito que tu tienes para mi se romperá y que dirá la gente: “¿luego no le habías dicho que trabajara en pos de ti para que el corazón de los padres se volviera hacia los hijos y el corazón de los hijos se volviera hacia los padres?”, ¿Quedará inconclusa?, Señor emite un veredicto para mi libertad, para romper la acusación que el enemigo levantó no solo contra mi destino sino también contra tu propósito.,
Levante la mano al cielo, la Palabra dice que Él es nuestro Juez presento a mi abogado; Él es mi justicia, en la cruz del calvario llevó mi pecado y mi maldad y me hizo justo, hoy abro las escrituras en Colosenses 2:13-15”, en el nombre de Jesús mi justicia, Yahshua mi Sidkenu .