Saltar al contenido
Portada » Charlas ETP » El Llamado De Dios en Tu Vida, Tu Hogar y Tu Descendencia

El Llamado De Dios en Tu Vida, Tu Hogar y Tu Descendencia

1 Samuel 3:4.

Que difícil es seguir al Señor, que difícil es dejarlo todo incluyendo convicciones, ideas, pensamientos, filosofías, doctrinas, dogmas y religiones. Un día le pregunte al Señor ¿Por qué es tan difícil cumplir un propósito en ti?, ¿Por qué es tan difícil obedecer no solo tus principios y fundamentos registrados en Tu Libro y las tareas que nos colocas para estos tiempos?, escucha esto: Muchos cuando son llamados por Dios, se dan por vencidos debido a que el llamado lleva consigo un proceso. Escucha: sin importar la actividad que estés ejecutando; algunos “pastoreaban ovejas”,  otros “sembraban grano”, otros “arreando bueyes”, hoy Dios te dice “Yo no te dejaré hasta que haya hecho lo que te dije que iba a hacer, eres de mi propiedad”. Génesis 28:15.

Miremos con lupa a algunos que fueron llamados por Dios para ejecutar una tarea:

Abraham: El primer hombre que escuchó la voz de Dios, obedeció al invisible y tuvo que dejar todo incluyendo “convicciones, ideas, pensamientos, filosofías, doctrinas, dogmas, religiones”, para completar el sueño de Dios a través de una promesa: Génesis 12:2-3, pero me da curiosidad el verso 4: “Y se fue Abram como Jehová le dijo;…”.

Sin importar nada hizo lo que Dios le dijo, se enfrentó a duras pruebas, la mas grande de todas, creerle a Dios a pesar de que su esposa Sara era estéril ya que de Abraham y de Sara vendría una descendencia, pero ¿descendencia de donde, de una mujer estéril?. Lo único anormal que hizo fue creer al invisible y fue contado por “Justicia”. Génesis 15:6 “Y creyó a Jehová, y le fue contado por justicia”, Gálatas 3:6 “Así Abraham creyó a Dios, y le fue contado por justicia”, Santiago 2:23 “Y se cumplió la Escritura que dice: Abraham creyó a Dios, y le fue contado por justicia, y fue llamado amigo de Dios”.

Moisés: Tarea difícil convertirse en el libertador de todo un pueblo para que se cumpliese la promesa que Dios había hecho muchos años atrás: “Sacar a un pueblo de tierra de Egipto y llevarlo al borde de la tierra prometida”, ¿Cuanto le costó haber obedecido a Dios?.

Moisés fue llamado mientras servía en Egipto, siendo un faraón, teniendo la cultura egipcia en su modus vivendus; sin embargo el siente que tiene un llamado, el de liberar a su pueblo de Egipto, Éxodo 2:11-13, Hebreos 11:24-26. Moisés renuncia a ser faraón porque sabia que tenia un llamado, era un anhelo interno que comenzó a avivarse día a día, el problema de todo es que después de ese anhelo interno viene el proceso y muchos no quieren pasar por “ese proceso”; Moisés fue llevado al desierto 40 años allí fue procesado su carácter, la tarea la tenía que hacer a la manera de Dios, no a la manera de él; fueron 40 años de errores, de equivocaciones, de caídas y levantadas, de arrepentimientos y después de esos 40 años llegó el tiempo perfecto de Dios, ya que Su llamado es lo más precioso que le puede ocurrir a un ser humano, está escrito en Salmos 65:4.

En esos años de proceso lo que hace es acercarse a ti para luego colocarte en una zarza ardiendo en medio del desierto, allí te va a dar instrucciones para poder cumplir tu propósito; eso fue lo que hizo con Moisés y cual era el objetivo, que él pudiera pastorear a millones de personas, no a dos ni a tres, y Dios habla a tu vida hoy, porque tal vez no has podido pastorear a dos o tres en tu hogar, no has podido ordenar tu casa, tu familia, no ha podido traer libertad a los tuyos, a tus próximos; Dios le da la responsabilidad a Moisés de pastorear a 2 o 3 millones de personas, que gran responsabilidad.

Después de los 40 años de proceso viene el segundo proceso: Ejecutar lo que Dios te mandó a hacer, pero no te olvides de buscar a Dios en intimidad, en cotidianidad, porque si lo que haces para Dios ocupa el tiempo para la intimidad y cotidianidad con Dios entonces vas a alejarte de la “Comunión con Dios” y este es el secreto, solo en la comunión con Dios, vas a escuchar “Y dijo Dios a (Tu nombre)” miles y miles y miles de veces…

El Señor nos está dando una oportunidad para arrepentirnos, volvernos a Él antes que venga el día terrible, el día oscuro, “Sin la luz de Jesús”, antes que se cierre la puerta a los gentiles…

Ministración. Hoy vas a tomar la decisión más importante de tu vida, entrar al arca de la salvación, apartar tu vida, tu hogar y tu descendencia para Dios, hoy vamos a abrir nuestra boca para colocar propósito y destino para nuestros próximos, muchas veces hemos abierto nuestra boca para desviarlos del propósito de bendición a un propósito de maldición, comienza por ti, toma la decisión de comenzar a ordenar tu vida, en todas las áreas, espiritual, emocional, sexual, física, económica y vamos a continuar con nuestros próximos a través de la Palabra, a través de nuestro testimonio, levanta tu voz…

Hoy como sacerdotes y profetas levantamos nuestra voz, abrimos nuestra boca para profetizar palabra del Señor, promesas que salen de la boca de Dios y se cumplirán en mi vida, mi hogar y mi descendencia:

  • No temeré, estaré firme y veré la salvación que el Señor hará con nosotros hoy.
  • Hoy el Señor está conmigo y me guardará y me defenderá y me librará de la mano de los malos y me redimirá de la mano de los fuertes.
  • El Señor defenderá mi pleito y salvará a mis hijos y a los que me despojaron el Señor hará comer sus propias carnes y con su propia sangre serán embriagados y todos conocerán que el Señor es mi salvador y mi redentor.
  • El Señor está conmigo como poderoso gigante, todos los que me persiguen tropezaran y serán confundidos y avergonzados.
  • Hoy veo que el Señor me salva con la potencia salvadora de Su diestra.
  • La guerra no es nuestra sino del Señor, hoy nos paramos firmes y veré la salvación de Dios para mi vida, mi hogar y mi descendencia.
  • No habrá para que pelear en este caso, estoy firme y quiero y con mis ojos veré la salvación del Señor con nosotros.
  • Mi vida está ligada en el haz de los que viven delante del Señor y el Salvará mi vida, mi hogar y mi descendencia y todos mis enemigos serán arrojados como se arroja una piedra con una honda.
  • El Señor nos restituirá, Él está conmigo, siempre me ayudará, siempre me sustentará con la diestra de Su justicia, Él me sostiene con Su mano derecha y me dice: No temas, yo te ayudo.
  • Porque cercano esta de mí el que me salva, no hay quien me condene porque todos ellos se envejecerán como ropa de vestir, serán comidos por la polilla.
  • El nos defenderá como un León y así traten de asustarme con sus gritos, así vendrá el todopoderoso y nos defenderá.
  • El ha apartado mis juicios, ha echado fuera a mis enemigos, Él está en medio de mi, nunca mas veré el mal.
  • A partir de hoy en mi vida, mi hogar y mi descendencia nacerá mi luz como el alba, y mi salvación se dejará ver pronto, e irá mi justicia delante de mi y la gloria del Señor será mi retaguardia.
  • Nunca más se oirá violencia en mi tierra, ni destrucción, ni quebrantamiento, ni desamparada, ni desolada, mi casa se llamará “salvación”, “Mi deleite está en ti”, porque la salvación y el amor del Señor estará en medio de nosotros.
  • Mis hijos serán enseñados por el Señor y se multiplicará la paz de mis hijos, seré adornado con justicia, estaré lejos de opresión y de temor, el que conspire contra mi caerá delante de mi, ninguna arma forjada contra mi prospera y condenaré toda lengua que se levante contra mi.
  • Rama fructífera son mis hijos, los frutos de mi simiente y de mi vientre son estimados por el Señor, mis hijos son herencia del Señor, somos bienaventurados y bendecidos…

Escucha las charlas en En iTunes o en Spotify Recuerda unirte a nuestras transmisiones en vivo de los cultos todos los domingos a las 9AM y los martes a las 6PM durante el periodo de cuarentena!