Mateo 16:23, 2ª Crónicas 30:9. A lo largo de nuestra vida, muchas veces tenemos que enfrentarnos a situaciones difíciles e imposibles de superar humanamente hablando. Ellas se levantan contra nosotros intentando no sólo afectarnos en lo terrenal sino también en lo espiritual. Dios quiere levantar un remanente, porque con el remanente de Su pueblo quiere hacer grandes cosas.
Estas situaciones que se presentan en tu vida, tu hogar y tu descendencia vienen con una sola misión: Perder las bendiciones de Dios.
Desviarnos del propósito que Dios tiene para tu vida, tu hogar y tu descendencia, recuerda que Dios tiene para ti todo lo bueno, agradable y perfecto.
La palabra estorbo es todo aquello que resulta un obstáculo, que no te permite avanzar y traen como consecuencias problemas, dificultades y situaciones difíciles e imposibles de la vida cotidiana y muchas veces las consentimos porque no creemos que hayan más soluciones: Levanta tu mano y abre tu boca a lo que dice: Jeremías 20:11-12.
Todo los que te estorba, tus problemas y dificultades están dentro de ti, están en tu corazón que es lo más sagrado que tenemos. Las más grandes guerras espirituales se viven en el corazón del ser humano, porque una de las grandes funciones del corazón es regular el fluir de la vida de una persona, es el lugar donde se establece la intimidad con Dios, por eso el enemigo busca tomar cautivo el corazón del pueblo de Dios, el enemigo está detrás de tu corazón, porque allí están todas las áreas de tu vida : espiritual, emocional, física, sexual y económica y quien tiene el control de tu corazón tiene el control de tu vida. Escucha las charlas en el nuestro podcast o en iTunes