La bendición de Jehová es la que prospera nuestros caminos, Dios le da la bendición al hombre, y le entrega por posesión por herencia la tierra.
Tu conducta desata maldición o bendición, por tal razón tenemos que comenzar a caminar en justicia, pero hay gente que a pesar que ha recibido la gracia, la redención y la salvación de Dios, en vez de producir frutos de justicia, producen frutos de injusticia; tenemos que vivir en justicia para recibir justicia, tenemos que sembrar bendición para recibir bendición.
Show Notes
La bendición de Jehová es la que prospera nuestros caminos, Dios le da la bendición al hombre, y le entrega por posesión por herencia la tierra.
Tu conducta desata maldición o bendición, por tal razón tenemos que comenzar a caminar en justicia, pero hay gente que a pesar que ha recibido la gracia, la redención y la salvación de Dios, en vez de producir frutos de justicia, producen frutos de injusticia; tenemos que vivir en justicia para recibir justicia, tenemos que sembrar bendición para recibir bendición.
Es necesario cambiar cambiar nuestra conducta, nuestra manera de actuar y de pensar, hay personas que quieren recibir bendición pero viven una vida maldiciente, una vida desagradable delante del Señor, la Palabra dice que “la maldición nunca vendrá sin causa”, Proverbios 26:2, así que cuando introducimos pecado, maldad, iniquidad a nuestra tierra, la tierra se levanta en contra nuestra y nos vomita de ella, en el libro de Levítico 18:27-30 habla que si nuestra tierra se contamina con brujería, hechicería, idolatría, inmoralidad o pecados de todo tipo entonces la tierra se convierte en nuestro enemigo y la tierra nos vomita; el problema es que nunca hemos tratado con la tierra contaminada, nos hemos dado cuenta que la tierra nos ha vomitado y que ha cerrado la bendición para nosotros y ha traído ruina, escasez, enfermedad, división, rupturas, divorcios y maldiciones, y todo esto lo llevamos de generación en generación.
Hoy es el día de hacer un pacto de paz con Dios a través de la muerte de su hijo Jesucristo en la cruz del calvario, está escrito en el libro de Gálatas 3:13 “Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición…”.
Maldición: Es humillación, aridez, esterilidad, enfermedad física y mental, desintegración familiar, pobreza, derrota, opresión, fracaso, des-favor de Dios en Lamentaciones 3:64-66 encontramos la definición más próxima a lo que es Maldición: Es el pago dado por Dios sobre una persona y su descendencia como resultado de su iniquidad.
Maldecir significa: Quitar méritos, deshonrar, restar valor, impedir u obstaculizar el propósito y una de las grandes causas es la iniquidad, la cual está en el cuerpo espiritual, allí esta el ADN, un elemento en el cual esta grabada toda la información espiritual de generación en generación, hay maldiciones que llegan a nuestra vida producto de las palabras, cuando personas de autoridad lanzan palabras de maldición o nosotros lanzamos palabras de maldición sobre las personas o cosas con las cuales tenemos autoridad, y estas palabras quedan marcadas en el interior de la persona, esto lo encontramos en el libro de Proverbios 18:21 «En la lengua hay poder de vida y muerte”; hoy vamos a tomar grandes decisiones que van a traer libertad sobre nuestra vida, hogar y descendencia; vamos a aborrecer la maldición, ya que muchas veces amamos más la maldición que la bendición, está escrito en el libro de los Salmos 109:17-19; y el problema de todo esto es que de una manera u otra toca nuestros hijos y nuestra descendencia, no porque ellos paguen lo que nosotros hemos hecho; está escrito que no ocurre así; lo que ocurre es que nuestros hijos repiten lo que “ven al interior de sus hogares y sus familias” y la Palabra dice que “Dios visita la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación”, Éxodo 20:5b-7.
Familias enteras han sido fundadas a través de consagraciones a dioses paganos, sacrificios, derramamiento de sangre, pecados sexuales o toda forma de sexo ilícito como violaciones, incestos, fornicación, adulterio, deshorna a sus padres, maledicencia, robar lo que le pertenece a Dios, Injusticias, idolatrías y ocultismo; por esto es importante identificar que maldiciones hay en nuestra vida y como se manifiestan en nuestro hogar, familia y descendencia:
- Las Enfermedades crónicas. Las enfermedades crónicas pueden ser causa de muerte en una familia por varias generaciones. Enfermedades que los médicos llaman genéticas o hereditarias, como por ejemplo: diabetes, presión alta, enfermedades del corazón, asma, cáncer, artritis, entre otras.
- La Esterilidad física y económica.
- Desintegración de la Familia. Toda forma de divorcios, viudez, madres solteras.
- La Pobreza o Insuficiencia Económica Continua. Esta maldición opera en algunas personas; no importa cuánto dinero ganen siempre viven en escasez, nunca pueden ver prosperidad en sus finanzas y el dinero se les va de las manos como agua.
- Los Accidentes Violentos.
- Una Secuencia de Suicidios, Muertes Prematuras y Antinaturales.
Existen leyes que gobiernan las maldiciones:
- Hay una causa para toda maldición: Proverbios 26:2.
- El Pecado es la puerta para que entre la maldición en tu vida, tu hogar y tu familia: Génesis 3:17-18.
- Toda maldición es un problema espiritual que no se puede remediar por métodos naturales: Gálatas 6:7.
- Cristo nos redimió de la maldición de la ley, ya que la ley no provee soluciones para la maldición: Gálatas 3:13.
- El Señor proveyó promesas a través de Su Palabra: Jeremías 31:29, Ezequiel 18:2-3.
- El Señor ha prometido bendecirnos, El ha dicho que este es el tiempo de bendecir a todos aquellas familias que están aquí: Zacarías 14:11.
- Para que venga la bendición es necesario romper la maldición, y esta se rompe en la cruz del calvario cuando quitamos la confianza en nuestro propio esfuerzo, sabiendo que el Señor lo hizo todo en la Cruz del Calvario. Isaías 53:5.
En el libro de Deutéronomio 30:19 habla de tomar la decisión: “Hoy nos levantamos en justicia, nos apartamos de toda injusticia, confesamos nuestros pecados, nuestra maldad y nuestra iniquidad delante de YHWH y los colocamos en el madero donde Yahshua cargó con nuestro pecado, nuestra maldad y nuestra iniquidad porque escrito está “Maldito el que muere en un madero”. De esta manera declaramos que toda maldición se rompe la iniquidad y la maldición que hay sobre nuestras vidas y la de nuestros descendientes”.
- Si usted está con sus padres pídales que coloquen aceite en su mano y coloquen sus manos sobre sus cabezas, se arrepientan y pidan perdón por los pecados de ellos y declaren que “Quitan toda maldición generacional” que ha venido sobre sus descendientes.
- Si no se encuentran sus padres, entonces la persona que tiene autoridad es su cónyuge, entonces cada cónyuge va a orar por su cónyuge.
- Si usted tiene hijos entonces coloque aceite en su mano y rompa la maldición de sus descendientes y llévelos a la cruz.
- Ahora va a declarar la “Bendición Sacerdotal” sobre sus descendientes. Números 6:24-27.