Joel 2:25 “Y os restituiré los años que comió la oruga, el saltón, el revoltón y la langosta, mi gran ejército que envié contra vosotros”.
El libro de Joel está marcado de eventos proféticos que narra el juicio y la gracia de Dios conjuntamente; enfatiza que, mediante el verdadero arrepentimiento el pueblo de Dios podrá recibir las bendiciones de Dios.
Contiene también muchas profecías sobre la llegada de “El día del Señor” y los tiempos finales marcado por las señales de la segunda venida del Señor; Joel 1:15 “¡Ay del día! porque cercano está el día de Jehová, y vendrá como destrucción por el Todopoderoso”.
Quiero resumir un poco el contenido del libro de Joel:
- En Joel capitulo 1 describe un desastre apocalíptico causado por una plaga de langostas. Llama al pueblo a ayunar y a congregarse en el templo, en asamblea solemne, para suplicar al Señor que los libere.
- En Joel capitulo 2 describe el “día del Señor” y entonces hace énfasis en una pregunta en Joel Capitulo 2:11 “Y Jehová dará su orden delante de su ejército; porque muy grande es su campamento; fuerte es el que ejecuta su orden; porque grande es el día de Jehová, y muy terrible; ¿quién podrá soportarlo?”.
- El Señor de manera enfática le dice al pueblo: “Vuelve a mi con todo el corazón, con ayuno, con lloro y con lamento, esta es la verdadera definición de arrepentimiento. Es necesario anotar algunos de los beneficios por arrepentirse:
- El perdón al pueblo por su arrepentimiento: Joel Capitulo 2:18 «Y Jehová, solícito por su tierra, perdonará a su pueblo”.
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- La provisión del pan (alimento espiritual y físico), mosto (el gozo y la paz), el aceite (la unción del Espíritu Santo, Joel Capitulo 2:19 «Responderá Jehová, y dirá a su pueblo: He aquí yo os envío pan, mosto y aceite, y seréis saciados de ellos; y nunca más os pondré en oprobio entre las naciones”.
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- La destrucción de los enemigos: Joel Capitulo 22:20 «Y haré alejar de vosotros al del norte, y lo echaré en tierra seca y desierta; su faz será hacia el mar oriental, y su fin al mar occidental; y exhalará su hedor, y subirá su pudrición, porque hizo grandes cosas”.
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- El derramamiento de la lluvia temprana y tardía la cual trae provisión, abundancia y sobreabundancia: Joel Capitulo 2:23-24.
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- El tiempo de la restitución de todo lo que se comió la oruga, el saltón, el revoltón y la langosta el ejército que envió el Señor debido al pecado del pueblo: Joel Capitulo 2:25.
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- El derramamiento del Espíritu Santo sobre toda carne: Joel Capitulo 2:28-29.
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- Y el gran día del Señor, los eventos de los últimos tiempos que estamos viviendo los de ésta generación: Joel Capitulo 2:30-32.
Ahora miremos todo lo que está ocurriendo al interior de nuestras vidas en este tiempo.
La mayoría de nosotros hemos desperdiciado muchos años de nuestra vida, podemos mirar atrás y darnos cuenta que muchas áreas de nuestra vida fueron devorados por la oruga, el saltón, el revoltón y la langosta, por causa del pecado, la iniquidad, la maldad y la rebelión.
Capitulo Joel 1: 10-12 nos dice como estaba todo, todo se había acabado, hasta la gente moría, hasta la semilla había sido devorada, y al perderse la semilla, van ha ver problemas, no había un mañana. Y no había nada para ofrecer ofrendas ni sacrificios.
Quien todo, por que nos hemos empezado a despojar de todo, para poder comprar comida, para comprar amor. Se vende a causa del hambruna, por ese dice que el día grande y terrible Deutéronomio 28:38, Dios nos ha dado leyes y estatutos para obedecer
La buena noticia es que Dios nos ha prometido restaurarnos y restituirnos de todos los males de nuestro pasado, las angustias, las luchas de la derrota, y las frustraciones de nuestras vidas, todas las veces que nos hemos sentido destruidos sin posibilidad alguna de ser levantados.
No podemos cambiar el pasado, no podemos volver atrás y hacer las cosas de nuevo, pero a partir de este momento podemos entregar a Dios todo ese pasado cargado de eventos desastrosos y confiar en Él para que Él restaure y restituya todo lo que se ha perdido, está escrito en la Palabra en Isaías Capitulo 43:16-20 “No os acordéis de las cosas pasadas, ni traigáis a memoria las cosas antiguas. He aquí que yo hago cosa nueva; pronto saldrá a luz; ¿no la conoceréis? Otra vez abriré camino en el desierto, y ríos en la soledad, para que beba mi pueblo, mi escogido”, y en Hechos 3:19-21 «Así que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados; para que vengan de la presencia del Señor tiempos de refrigerio, y él envíe a Jesucristo, que os fue antes anunciado; a quien de cierto es necesario que el cielo reciba hasta los tiempos de la restauración de todas las cosas, de que habló Dios por boca de sus santos profetas que han sido desde tiempo antiguo”.
Capitulo 2: 12-14 arrepentimiento
Por medio del arrepentimiento todo lo que se había perdido por el pecado se restaura, Dios en su infinito amor, en su infinita misericordia y en su infinita bondad por medio de Cristo, restaura al pecador, borra el pecado, y acaba con sus consecuencias eternas. Cuando Dios restaura nuestros años perdidos, Él trae alegría sobrenatural, la revelación, la paz y la victoria.
Restaurar quiere decir volver algo a su condición original, restitución es devolver a alguien algo que le fue quitado que le pertenecía. «Restituir» es devolver una cosa a quien la tenía antes, es la recompensa por daños y perjuicios que se otorga al afectado.
Hay un decreto que en el reino espiritual y esta en el libro de levíticos que establece que: «Una persona jamás puede ser despojada injustamente de lo que le pertenece», hoy vamos a tomar la autoridad y vamos a ordenarle al enemigo que nos devuelta absolutamente todo lo que financiera, personal, física, laboral, familiar, y ministerialmente nos ha robado durante todos estos años… Porque es tiempo de ¡RESTITUCION!.
El Señor no dejará que el enemigo te quite algo, Dios no dejará las cosas así, no te rindas porque hoy hay una promesa que sale de la boca de Dios y es para ti “Yo te devolveré todo”.
Ministración: Hoy el Señor está llamando a Su pueblo a una genuina conversión. Qué significa “convertíos”? del hebreo shub, significa volver a traer, regresar, básicamente es volver al punto de partida, es regresar por un camino ya transitado, es volverse a Dios; y esa es la verdadera bendición, y por eso Dios le dice a su pueblo: Jeremías 6:16 “Paraos en los caminos, y mirad, y preguntad por las sendas antiguas, cuál sea el buen camino, y andad por él, y hallaréis descanso para vuestra alma”.