La vida del hombre está sometida a continuas decisiones y una de ellas es determinar mi destino y mi futuro no solamente en la tierra, sino también en la vida eterna. Jesús prometió no solamente un presente sino también un futuro, un presente donde tenemos vida y vida abundante y un futuro donde tendremos vida eterna; pero la decisión no es de Él, la decisión es nuestra y hoy lo tenemos que hacer con toda la responsabilidad, no “religiosa” sino “real”.
Desde el comienzo Dios ha querido, ha anhelado un pueblo, un Pueblo conformado por familias formados a Su imagen y semejanza y tanto en el llamado Antiguo Testamento con el pueblo de Israel como en el Nuevo Testamento con los gentiles siempre habló de lo mismo: “Transformar a un pueblo común y corriente en un… Pueblo Santo, Apartado, Único, de Su exclusiva posesión, Pueblo de Su heredad, Pueblo Especial más que todos los pueblos de la tierra”.
Show Notes
- El libro de la vida: Contiene los nombres de todos los ciudadanos de la “nueva Jerusalén”.
- Lucas 10:20: “Regocijaos de que vuestros nombres están escritos en los cielos”.
- Éxodo 32:31-32: “Moisés en medio de la hecatombe que vivía el pueblo de Israel en el desierto declaró: “… que perdones ahora su pecado, y si no, ráeme ahora de tu libro que has escrito, y Jehová respondió: Al que pecare contra mi, a éste raeré yo de mi libro”.
- Filipenses 4:3: “Pablo declara a los Filipenses “… cuyos nombres están en el libro de la vida”.
- Apocalipsis 17:8: “La bestia que has visto, era, y no es; y está para subir del abismo e ir a perdición; y los moradores de la tierra, aquellos cuyos nombres no están escritos desde la fundación del mundo en el libro de la vida, se asombrarán viendo la bestia que era y no es, y será.”.
- Daniel 12:1: “… pero en aquel tiempo serán libertado todos los que se hallen escritos en el libro”.
- Apocalipsis 21:27: “No entrará en ella ninguna cosa inmunda, o que hace abominación y mentira, sino solamente los que están inscritos en El Libro de La Vida del Cordero.”.
- Apocalipsis 3:5: “… El que venciere será vestido de vestiduras blancas; y no borraré su pobre del libro de la vida, y confesaré su nombre delante de mi Padre, y delante de sus ángeles”.
- Un libro de memorias: Escrito está delante de Dios, en el cual se registran las memorias de Dios:
- Malaquías 3:16-17: «Entonces los que temían a Jehová hablaron cada uno a su compañero; y Jehová escuchó y oyó, y fue escrito libro de memoria delante de él para los que temen a Jehová, y para los que piensan en su nombre.Y serán para mí especial tesoro, ha dicho Jehová de los ejércitos, en el día en que yo actúe; y los perdonaré, como el hombre que perdona a su hijo que le sirve. Entonces os volveréis, y discerniréis la diferencia entre el justo y el malo, entre el que sirve a Dios y el que no le sirve.”.
- Salmos 56:8: “Mis huidas tú has contado; Pon mis lágrimas en tu redoma; ¿No están ellas en tu libro?”.
- Salmo 139:16. «Mi embrión vieron tus ojos, Y en tu libro estaban escritas todas aquellas cosas que fueron luego formadas, sin faltar una de ellas.”.
- Hay un registro también de todas nuestras acciones.
- Eclesiastés 12:13-14: “El fin de todo el discurso oído es este: Teme a Dios, y guarda sus mandamientos; porque esto es el todo del hombre. Porque Dios traerá toda obra a juicio, juntamente con toda cosa encubierta, sea buena o sea mala.”.
- Mateo 12:36-37: “De toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán cuenta en el día del juicio. Por tus palabras serás justificado, y por tus palabras serás condenado”.